HIPERMETROPÍA
Para que sea posible que nuestros ojos vean, los rayos de luz deben ser doblados o refractados por la córnea y el cristalino y así puedan enfocarse en la retina, la capa de células fotosensibles que recubre la parte posterior del ojo. La retina recibe la imagen formada por los rayos de luz y la envía al cerebro a través del nervio óptico, el cual es en realidad una parte del cerebro. Cuando hay una hipermetropía, el ojo es demasiado corto. Los objetos cercanos se ven borrosos porque las imágenes se enfocan más allá de la retina.

Algunas señales y síntomas de la hipermetropía incluyen tener dificultad con las tareas de ver de cerca, como la lectura, tener la vista cansada, entrecerrar los ojos y tener dolores de cabeza.
MIOPÍA
Para que sea posible que nuestros ojos vean, los rayos de luz deben ser doblados o refractados por la córnea y el cristalino y así puedan enfocarse en la retina, la capa de células fotosensibles que recubre la parte posterior del ojo. La retina recibe la imagen formada por los rayos de luz y la envía al cerebro a través del nervio óptico, el cual es en realidad una parte del cerebro. Cuando hay una hipermetropía, el ojo es demasiado corto. Los objetos cercanos se ven borrosos porque las imágenes se enfocan más allá de la retina.
Algunas señales y síntomas de la miopía incluyen fatiga visual, dolores de cabeza, la acción de entrecerrar los ojos para ver bien y dificultad para ver objetos lejanos, tales como señales de tráfico o una pizarra en la escuela.
ASTIGMATISMO
El astigmatismo es una imperfección en la curvatura de la córnea o en el cristalino del ojo. Como resultado de cualquiera de estos tipos de astigmatismo, la visión cercana o lejana de los objetos se torna borrosa o distorsionada.

En un ojo normal, la córnea y el cristalino enfocan los rayos de luz sobre la retina-
Cuando hay astigmatismo, las imágenes se enfocan en frente y más allá de la retina, causando que tanto la visión cercana como la lejana se torne borrosa
La mayoría de la gente probablemente nace con algún grado de astigmatismo, y tenerlo conjuntamente con otros defectos de refracción: una miopía o una hipermetropía.
En ocasiones, el astigmatismo puede desarrollarse después de una lesión, una enfermedad, o una cirugía ocular. Es un mito que el astigmatismo se desarrolla o empeora debido a actividades como la lectura con poca luz, o sentarse muy cerca de la televisión.
PRESBICIA
La presbicia, que literalmente significa «ojo envejecido», es una condición ocular relacionada con la edad que hace difícil ver las cosas de cerca.
Cuando se es joven, el cristalino del ojo es suave y flexible. Éste cambia su forma fácilmente, lo que le permite enfocar objetos cercanos y lejanos. Después de los 40 años de edad, el cristalino se vuelve más rígido. Debido a que el lente no puede cambiar de forma tan fácilmente como antes, actividades como la lectura o ver cosas a corta distancia es más difícil. Esta condición normal se denomina presbicia.
Debido a que casi todas las personas desarrollan presbicia, si otras condiciones como la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo existen, dichas condiciones se mezclan.
Algunas señales y síntomas de la presbicia incluyen fatiga visual, dolores de cabeza o sentirse cansado al realizar una actividad que requiera ver de cerca. Uno de los signos más evidentes de la presbicia es la necesidad de mantener los materiales de lectura a distancia con el fin de enfocarlos correctamente.
Los anteojos de lectura, bifocales o progresivos, son una manera muy común y fácil de corregir los síntomas de presbicia.
Ya que el cristalino del ojo cambia continuamente con la edad, usted tendrá que aumentar su prescripción con el tiempo.
OJO PEREZOSO (AMBLIOPÍA)
La ambliopía es un tipo de visión deficiente que se presenta generalmente en un solo ojo. Se desarrolla cuando hay una falla en el funcionamiento conjunto del cerebro y el ojo, y el cerebro no puede reconocer la visión de un ojo. Con el tiempo, el cerebro depende cada vez más del ojo más fuerte, mientras que la visión del ojo más débil empeora.
Comienza en la niñez y es la causa más común de pérdida de visión entre los niños. Hasta 3 de cada 100 niños la padecen. La buena noticia es que el tratamiento temprano funciona bien y generalmente previene los problemas de visión a largo plazo.
SÍNTOMAS
Los síntomas de la ambliopía pueden ser difíciles de notar. Los padres podrían notar señales de que su hijo tiene dificultades para ver con claridad, como por ejemplo: entrecerrar los ojos para poder enfocar, cerrar un ojo, inclinar la cabeza, bajo rendimiento escolar.
Por eso es importante que a todos los niños se les haga un examen visual al menos una vez entre los 3 y los 5 años de edad.